Espacio de reflexión

El papel de Ayuso en el Congreso del PP

Ayuso ha actuado con cierta dosis de inteligencia, lo cual me ha sorprendido. En primer lugar, ha consolidado su imagen de líder autónoma, con un peso propio dentro del PP. Marcó distancia con Feijóo pero sin abrir una crisis interna, lo cual le permite seguir formando parte del frente anti-Sánchez sin ser vista como desleal a la dirección del partido. De cara al futuro, si Feijóo no consigue aprovechar la actual situación para derrocar al gobierno en las próximas elecciones (sea cuando sea que se celebren) Ayuso es la figura que podría recoger el relevo del presidente gallego. La clave de bóveda del posible relevo de Ayuso por Feijóo es, precisamente, eso: que Feijóo no logre acceder al gobierno de la nación. 

Además, desde el punto de vista ideológico, me ha sorprendido que Ayuso se muestre partidaria de la libertad internaen el partido, de primarias abiertas y de una apertura ideológica. Veamos esto un poco más en detalle:

1. Libertad interna en el partido: Ayuso, aunque de manera velada, ha dejado el mensaje de que el PP no puede aparecer como un partido sectario, en el que todo está dirigido desde Génova, sin espacio para la discrepancia. Así lo manifestó con claridad: “Un partido no es una secta donde se pueda imponer un pensamiento único”.
2. Primarias abiertas: Esto supone un modelo más democrático puesto que el liderazgo se valora directamente en las urnas del partido y no en despachos o a través de decisiones controladas. Se reafirmó en este modelo con afirmaciones como “No podemos volver a un modelo en el que los liderazgos se deciden solo en despachos; creo en un partido con más participación de la militancia … el PP tiene que abrirse más, dejar que los afiliados tengan voz en las grandes decisiones y no limitarse a los órganos de dirección”.
3. Apertura ideológica: Ayuso es partidaria de debates ideológicos en el partido sobre temas sensibles como el aborto, los modelos de familia, la laicidad, la eutanasia, etc., y de permitir que puedan convivir diferentes sensibilidades en el PP. Así lo expresó: “Tenemos que debatir sobre todo, porque es la única manera de enriquecernos y de convertirnos en un partido que se repite a sí mismo”.

En definitiva, una Ayuso que se postula como líder del PP en un futuro apostando por la movilidad (primarias abiertas, libertad interna, apertura ideológica, etcétera), mientras que Aznar, en el otro polo, se ha mantenido en el pasado con un lenguaje de guerra y ausencia de autocrítica ni de un nuevo modelo ideológico.